Se dice que el jade o (YU), es la reina de todas las gemas, pues reúne las cinco virtudes cardinales: el amor al prójimo, la modestia, el valor, la justicia y la sabiduría.
Además también es un importante limpiador ideal para evitar las tensiones en las casas o limpiar el ambiente después de una discusión.
Simboliza belleza, virtud y tenaz autoridad.
Regala paz y tranquilidad.
Quien se identifica con ella, recibe fuerza magnética.
Prolonga la vida, mantiene la fertilidad.
Para quienes usan esta piedra, aumenta el nivel de conciencia.
Sus vibraciones son limpiadoras pues no absorben, sino que repelen cualquier tipo de negatividad.
Atrae suerte y dinero.
Protege de enfermedades y propicia sueños adivinatorios.
Para atraer la suerte a negocios y los juegos de azahar.
Llevar un consigo un fragmento de jade antes de firmar cualquier importante transacción, es de buena suerte.
El jade es un armonizador de energías ideal tanto para el cuerpo humano como para las casas, de ahí que en la antigüedad se utilizaran las esculturas en jade para decorarlas.
La armonización de las energías se plasma en un efecto calmante y tranquilizante ideal para personas que sufren de los nervios.
Además también es un importante limpiador ideal para evitar las tensiones en las casas o limpiar el ambiente después de una discusión.
Simboliza belleza, virtud y tenaz autoridad.
Regala paz y tranquilidad.
Quien se identifica con ella, recibe fuerza magnética.
Prolonga la vida, mantiene la fertilidad.
Para quienes usan esta piedra, aumenta el nivel de conciencia.
Sus vibraciones son limpiadoras pues no absorben, sino que repelen cualquier tipo de negatividad.
Atrae suerte y dinero.
Protege de enfermedades y propicia sueños adivinatorios.
Para atraer la suerte a negocios y los juegos de azahar.
Llevar un consigo un fragmento de jade antes de firmar cualquier importante transacción, es de buena suerte.
El jade es un armonizador de energías ideal tanto para el cuerpo humano como para las casas, de ahí que en la antigüedad se utilizaran las esculturas en jade para decorarlas.
La armonización de las energías se plasma en un efecto calmante y tranquilizante ideal para personas que sufren de los nervios.
Es una de las piedras que atrae el amor y lo mantiene. Llevar consigo una pieza de jade verde mientras se trabaja en el jardín es excelente para mejorar la salud de las plantas.
El jade lo hay de muy distintos colores, pero quizá el más conocido es el jade verde. También es el más utilizado en gemoterapia por sus poderosas propiedades curativas.
Además también es un importante limpiador ideal para evitar las tensiones en las casas o limpiar el ambiente después de una discusión.
Es un cristal que relaja mucho y permite la superación de traumas psíquicos de cualquier tipo. Tonifica los nervios y suaviza las emociones.
Se cree que el jade trae buena suerte, salud y fortuna, ayuda en el parto y protege a los niños de las enfermedades. Por toda Asia millones de personas llevan amuletos de jade y creen que les procura a sus propietarios poder, erudición, pensamientos puros, larga vida e inmortalidad.
Jade amarillo: Es energético y estimulante, pero está cargado de cierta melosidad que produce alegría y felicidad. Enseña las interconexiones de todos los seres. Potencia los sistemas corporales, digestivos y de eliminación. Como todas las piedras amarillas, atrae suerte.